Me comentan los papás que la primera comunión es una excusa perfecta para fotografiarse en familia. Aprovechando del reportaje de comunión de los más pequeños podemos realizar fotos de toda la familia que serán un recuerdo importante en los años a venir.
La mejor manera de hacer un reportaje original con los niños es realizando dos sesiones cortas, una en exteriores y otra en estudio, así los niños no se cansan. En la primera sesión de fotos en exteriores se sienten cómodos estando en un lugar abierto y toman confianza conmigo, en la segunda ya es más fácil retratarlos con naturalidad en estudio.
A finales del verano me ha contactado Mari Carmen, la mamá de César para realizar un reportaje de comunión. Acordamos una cita en la playa del Saler, ese día vinieron preparados con raqueta y pelota porque el tenis y el fútbol son los deportes favoritos de César. En la sesión en exteriores participaron también su hermana, los papás y los yayos de Cesar así que pudimos realizar unas fotos de la familia al completo y unos bonitos retratos en la naturaleza.
Pasados unos días hicimos una segunda sesión en estudio con el traje de la Comunión. César es un niño dulce y espontáneo, en cada foto refleja su frescura sin posar, esta vez todos nos sentíamos más cómodos porque ya nos conocíamos. Utilizamos pompas de jabón y otros juegos para que Cesar y su hermana se lo pasaran bien, se divirtieran y su alegría quedara reflejada en las fotos.
No tengo mas que darle mi agradecimiento a César y su familia por éstas imágenes tomadas, espero que os gusten y que cuando los pequeños crezcan al ver estas fotos puedan recordar con cariño esta etapa importante de su vida.
La sesión de fotos en estudio :