Que honor fotografiar a Camila, ha sido una sesión de lo más significativa para ella y su familia. Camila tenía claro que quería algo informal pero elegante en la naturaleza y la playa. Estaba radiante, cada movimiento delante de la cámara fluía de manera natural.
La sesión la realizamos en un inmejorable sitio, el mirador de pájaros de la playa del Saler, Valencia. Era una tarde de diciembre en la que el viento soplaba fresco, pero las ganas y la emoción de Camila lo superaron todo.
Las mamás latinas nos emocionamos con el cumpleaños de 15 de nuestras hijas, soy argentina así que lo sé muy bien que significa para nosotras. Es un ritual de paso, de la niñez a la mujer adulta. Es un gran evento y motivo familiar para festejarlo a lo grande.
La luz del atardecer era de lo más cálida, contrastaba con el outfit que eligió Camila, un vestido perfecto para volar glamorosamente con el aire del mar. Ha sido una sesión de lo más gratificante, el resultado es maravilloso porque hemos podido plasmar la gracia y belleza natural de Camila .
Camila fue muy valiente, el viento frío no ha borrado su sonrisa tan fresca a la hora de posar para las fotos, en su mirada se ve la inocencia y las ganas de vivir la vida. Camila te deseamos toda la dicha para esta nueva etapa que comienza. Gracias a Johana, su mamá que planificó todo con tanto cariño y por confiar en nuestro trabajo.